De andar por casa
“Ya estoy cansado/a de
advertirle, pero le entra por un oído y le sale por el otro…”
Al final opta por ir
archivando los fallos para utilizarlos como piedras arrojadizas o argumentos
para no creer en nada de lo que le digan.
✠ Lectura del santo Evangelio según san Mateo. Mt 18, 15-20
Si te hace caso, has salvado a tu hermano
EN aquel tiempo, dijo
Jesús a sus discípulos: «Si tu hermano peca contra ti, repréndelo estando los
dos a solas. Si te hace caso, has salvado a tu hermano.
Si no te hace caso, llama a
otro o a otros dos, para que todo el asunto quede confirmado por boca de dos o
tres testigos. Si no les hace caso, díselo a la comunidad, y si no hace caso ni
siquiera a la comunidad, considéralo como un pagano o un publicano.
En verdad os digo que todo lo que atéis en la tierra quedará atado en los
cielos, y todo lo que desatéis en la tierra quedará desatado en los cielos.
Os digo, además, que si dos de
vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, se lo dará mi Padre
que está en los cielos. Porque donde dos o tres están reunidos en mi nombre,
allí estoy yo en medio de ellos».
Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Esta es la otra versión que
contraponemos al consejo que nos da Jesús para corregir a un hermano y que se
fundamenta en el amor y el respeto a la persona que ha cometido un error; en el
perdón que es una de las más grandes expresiones del amor.
Jesús nos invita a practicar el amor
invitando al otro a encontrar el camino; en cambio nosotros acentuamos la
pérdida de la confianza con lo que desaparece el amor. El momento que vamos
archivando los fallos para utilizarlos como arma arrojadiza, si es que en algún
momento se convierte y quiere cambiar, por lo que ya lo condenamos de antemano,
desconfiando en su palabra con lo cual, todos los pasos que nos indica Jesús
nos los saltamos y acabamos, como hoy
se suele hacer, con un linchamiento antes que haya un juicio donde se pueda
defender y saltándonos la presunción de inocencia