SANTA MARÍA, MADRE DE DIOS

De andar por casa

         Con cuanta frecuencia nos encontramos en situaciones que ni sabemos cómo se dieron ni se nos podrían haber ocurrido jamás y salimos de ellas sin saber cómo fue, ni de dónde sacamos el coraje para enfrentarlas. Y es que Dios escribe derecho con nuestros renglones torcidos-

EVANGELIO

Lectura del santo Evangelio según san Lucas. Lc 2, 16-21

Encontraron a María y a José y al niño. Y a los ocho días, le pusieron por nombre Jesús


        EN aquel tiempo, los pastores fueron corriendo hacia Belén y encontraron a María y a José, y al niño acostado en el pesebre. Al verlo, contaron lo que se les había dicho de aquel niño.
            Todos los que lo oían se admiraban de lo que les habían dicho los pastores. María, por su parte, conservaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón.
Y se volvieron los pastores dando gloria y alabanza a Dios por todo lo que habían oído y visto, conforme a lo que se les había dicho.
            Cuando se cumplieron los ocho días para circuncidar al niño, le pusieron por nombre Jesús, como lo había llamado el ángel antes de su concepción.

Palabra del Señor.

 REFLEXIÓN

            No podemos pasar por alto un dato que es importantísimo: los pastores eran lo último en la escala social; su testimonio no era admitido ni siquiera en un juicio como testigos, sin embargo, son ellos los que llegan contando cosas increíbles sobre el niño.

            Si ya era difícil de entender todo lo que estaba pasando, el medio por el que llega la información lo hace más difícil todavía.

            A María no le queda otra alternativa que fiarse de Dios y confiar en Él, o de lo contrario rebelarse y mandarlo todo con viento fresco.

            La única certeza que tiene es la fidelidad de Dios. El no falla, aunque no lo veamos. Yo no puedo evitar el pensar en las situaciones que se me presentaron en la vida y que no me quedó otra agarradera que la de María; al final resultó algo sorprendente, algo que jamás pude imaginar.  

LA SAGRADA FAMILIA:

 

JESÚS, MARÍA Y JOSÉ

  De andar por casa

         Ante la realidad que estamos viviendo es muy corriente escuchar frases como ésta: “Hoy, padres e hijos son familia retirada” y el último ataque que se nos ha hecho es decir que los hijos no pertenecen a los padres, sino al estado; y vemos cómo muchísima gente lo acepta, lo asume y lo aplaude.

 EVANGELIO

Lectura del santo Evangelio según san Lucas. Lc 2, 22-40
El niño iba creciendo, lleno de sabiduría


        CUANDO se cumplieron los días de su purificación, según la ley de Moisés, lo llevaron a Jerusalén para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley del Señor: «Todo varón primogénito será consagrado al Señor», y para entregar la oblación, como dice la ley del Señor: «un par de tórtolas o dos pichones».
            Había entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre justo y piadoso, que aguardaba el consuelo de Israel; y el Espíritu Santo estaba con él. Le había sido revelado por el Espíritu Santo que no vería la muerte antes de ver al Mesías del Señor. Impulsado por el Espíritu, fue al templo.
            Y cuando entraban con el niño Jesús sus padres para cumplir con él lo acostumbrado según la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo:
«Ahora, Señor, según tu promesa,
puedes dejar a tu siervo irse en paz.
Porque mis ojos han visto a tu Salvador,
a quien has presentado ante todos los pueblos:
luz para alumbrar a las naciones
y gloria de tu pueblo Israel».
            Su padre y su madre estaban admirados por lo que se decía del niño. Simeón los bendijo y dijo a María, su madre:
            «Este ha sido puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; y será como un signo de contradicción —y a ti misma una espada te traspasará el alma—, para que se pongan de manifiesto los pensamientos de muchos corazones».
            Había también una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser, ya muy avanzada en años. De joven había vivido siete años casada, y luego viuda hasta los ochenta y cuatro; no se apartaba del templo, sirviendo a Dios con ayunos y oraciones noche y día. Presentándose en aquel momento, alababa también a Dios y hablaba del niño a todos los que aguardaban la liberación de Jerusalén.
            Y, cuando cumplieron todo lo que prescribía la ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño, por su parte, iba creciendo y robusteciéndose, lleno de sabiduría; y la gracia de Dios estaba con él.

Palabra del Señor.

 REFLEXIÓN

            Cuando decide cumplir su proyecto para el hombre, hecho a su imagen y semejanza, coge lo elementos que realmente son esenciales al hombre y le pueden servir perfectamente para realizarse como hombre y ser feliz, que es en definitiva la primera y fundamental llamada e invitación que Dios le hace, pues Él no quiere para el hombre otra cosa que SER FELIZ y dar testimonio de esa felicidad.

            Y Dios escoge el espacio de la FAMILIA como el ambiente más adecuado, en donde pueden germinar, nacer, crecer y desarrollarse los grandes valores que pueden hacer al hombre feliz.

            Ya desde el mismo comienzo el hombre rompió el esquema queriendo hacer algo a su estilo y se convirtió en la ruina y en una maldición para la tierra…

            Hoy se lucha por destruir de nuevo el proyecto de Dios y estamos viendo cómo se acerca la ruina y la degradación total de la persona.

            Al paso que vamos, estamos viendo que el ser humano es el único que estorba en el paraíso.


DOMINGO IV DE ADVIENTO -B-

De andar por casa

Es muy probable que cuando piensas en tu vida y ves por dónde has pasado te digas: “Si yo llego a saber lo que me esperaba, no me hubiera decidido…” Pero ahora, que lo hemos vivido, nos sentimos orgullosos de lo que hicimos y lo contamos con satisfacción.

EVANGELIO

Lectura del santo Evangelio según san Lucas. Lc 1, 26-38

Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo

EN aquel tiempo, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María.
El ángel, entrando en su presencia, dijo:
«Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo».
Ella se turbó grandemente ante estas palabras y se preguntaba qué saludo era aquel.
El ángel le dijo:
«No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin».
Y María dijo al ángel:
«¿Cómo será eso, pues no conozco varón?».
El ángel le contestó:
«El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer será llamado Hijo de Dios. También tu pariente Isabel ha concebido un hijo en su vejez, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque para Dios nada hay imposible».
María contestó:
«He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra».
Y el ángel se retiró.
Palabra del Señor.

 REFLEXIÓN

            Muchas veces he pensado si la Virgen no se haría alguna vez la misma consideración que decíamos al principio.

            Ella, lo único que preguntó, ante la propuesta que Dios le hizo fue qué tenía que hacer. Y paso a paso fueron llegando las cosas que Dios tenía establecido en su plan, como ocurre siempre, y ella fue asumiendo y afrontando sin vacilar ni entorpecer el proceso.

            El “Sí” de María a la propuesta de Dios, no puedo evitar el contrastarlo con el sí condicionado que hoy se establece por norma: “Sí, pero”… si es que las cosas salen según me convenga”. El momento que no me conviene se acaba todo.

            Y se destruyen vidas, personas y hasta se mata… cuando la vida es un obstáculo a mis planes.

            ¿Qué hubiera pasado si María hubiera sido una feminista del s. XXI?

            Estamos viendo con toda claridad que los esquemas actuales del s. XXI no concuerdan en absoluto con los esquemas de Dios en ningún siglo de la historia.

 

 

 

DOMINGO III DE ADVIENTO -B-

 De andar por casa

Con mucha frecuencia escuchamos decir “¡Quién se habrá creído que es ese para que venga ahora dándonos lecciones y creyéndose el grande y el interesante…!”  Y no dejamos que resplandezca la verdad llevados por los prejuicios.

EVANGELIO

Lectura del santo Evangelio según san Juan. Jn 1, 6-8. 19-28

En medio de vosotros hay uno que no conocéis

SURGIÓ un hombre enviado por Dios, que se llamaba Juan: este venía como testigo, para dar testimonio de la luz, para que todos creyeran por medio de él.
No era él la luz, sino el que daba testimonio de la luz. Y este es el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron desde Jerusalén sacerdotes y levitas a que le preguntaran:
«¿Tú quién eres?».
El confesó y no negó; confesó:
«Yo no soy el Mesías».
Le preguntaron:
«¿Entonces, qué? ¿Eres tú Elías?».
Él dijo:
«No lo soy».
«¿Eres tú el Profeta?».
Respondió:
«No».
Y le dijeron:
«¿Quién eres, para que podamos dar una respuesta a los que nos han enviado? ¿Qué dices de ti mismo?».
Él contestó:
«Yo soy la voz que grita en el desierto: “Allanad el camino del Señor”, como dijo el profeta Isaías».
Entre los enviados había fariseos y le preguntaron:
«Entonces, ¿por qué bautizas si tú no eres el Mesías, ni Elías, ni el Profeta?».
Juan les respondió:
«Yo bautizo con agua; en medio de vosotros hay uno que no conocéis, el que viene detrás de mí, y al que no soy digno de desatar la correa de la sandalia».
Esto pasaba en Betania, en la otra orilla del Jordán, donde Juan estaba bautizando.
Palabra del Señor.

 REFLEXIÓN

            La gente sencilla escucha el mensaje de verdad que proclama Juan y siente la necesidad de cambiar sus vidas y pedir perdón por sus errores.

            Las autoridades, lo que menos les interesa es el mensaje, la verdad la tienen ellos y son los que la gestionan y se acercan a Juan para pedirle explicaciones y exigirle el permiso para poder hablar y proclamar el mensaje que lleva.

            Para ellos, la verdad está supeditada a sus títulos o a las credenciales que da la autoridad, que es la impone lo establecido por el poder. Lógicamente, no entienden la vida, si es que no está organizada por sus leyes de las que no escapan ni la justicia, la verdad y, por supuesto, la paz. Ellos viven en otro mundo muy distinto al del pueblo.

            ¡Qué razón tenía Jesús cuando dijo: “Te doy gracias, Padre, porque ocultaste estas cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a los sencillos”

DOMINGO II DE ADVIENTO -B-

 De andar por casa

¿Cuántas veces hemos escuchado, o incluso, hemos advertido a alguien conocido: “Cuando quieras venir un día a casa, avísame con tiempo para prepararte algo rico para comer”? Es que las cosas grandes, los grandes acontecimientos se han de preparar bien para que el resultado sea un éxito.

EVANGELIO

✠ Lectura del santo Evangelio según san Marcos. Mc 1, 1-8

Enderezad los senderos del Señor

COMIENZA el Evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios.
Como está escrito en el profeta Isaías:
«Yo envío a mi mensajero delante de ti,
el cual preparará tu camino;
voz del que grita en el desierto:
“Preparad el camino del Señor,
enderezad sus senderos”».
Se presentó Juan en el desierto bautizando y predicando un bautismo de conversión para el perdón de los pecados. Acudía a él toda la región de Judea y toda la gente de Jerusalén. Él los bautizaba en el río Jordán y confesaban sus pecados.
Juan iba vestido de piel de camello, con una correa de cuero a la cintura y se alimentaba de saltamontes y miel silvestre. Y proclamaba:
«Detrás de mí viene el que es más fuerte que yo y no merezco agacharme para desatarle la correa de sus sandalias. Yo os he bautizado con agua, pero él os bautizará con Espíritu Santo».
Palabra del Señor.

 REFLEXIÓN

            En este segundo domingo de adviento ya se nos viene anunciando algo grande, el acontecimiento más grande de la historia: Dios ha decidido hacerse hombre y unirse con nosotros.

            Podía haber hecho las cosas de mil maneras pero quiso hacerse hombre y asumir las formas y los esquemas humanos: se va haciendo anunciar  a través de los siglos por los profetas, después escoge su madre y quien va a ser su padre adoptivo y surge Juan Bautista que vendrá anunciando su inminente aparición, y proclamando la actitud que debemos tener para recibirlo; por eso pide un cambio radical en nuestras vidas, una conversión que nos haga dejar todos los esquemas injustos en los que nos movemos y la mentira en la que andamos

 

DOMINGO I DE ADVIENTO -B-

  De andar por casa:

         Es muy corriente escuchar consejos como éste a personas que estimamos: “Tú vive la vida, que son tres días, aprovéchate y disfruta que son tres días, pues lo que hayas gozado es lo que te vas a llevar…” Y algunos se lo toman en serio hasta el punto que no aceptan lo más mínimo que les pueda suponer un poco de esfuerzo o una responsabilidad. Colocándose en una situación de fuera de juego constantemente

 EVANGELIO

Lectura del santo Evangelio según san Marcos. Mc 13, 33-37

Velad, pues no sabéis cuándo vendrá el señor de la casa

 EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Estad atentos, vigilad: pues no sabéis cuándo es el momento.
Es igual que un hombre que se fue de viaje, y dejó su casa y dio a cada uno de sus criados su tarea, encargando al portero que velara.
Velad entonces, pues no sabéis cuándo vendrá el señor de la casa, si al atardecer, o a medianoche, o al canto del gallo, o al amanecer: no sea que venga inesperadamente y os encuentre dormidos.
Lo que os digo a vosotros, lo digo a todos: ¡Velad!».
Palabra del Señor

 REFLEXIÓN

             Frente a esta situación que suele ser tan común, viene hoy Jesús a darnos su opinión y decirnos que esa es una postura equivocada para la vida, pues aquí vinimos con una misión muy concreta y no podemos evadirnos de ella bajo ningún motivo. Escurrir el hombro y desentenderse es el resultado de una falta de fe y de esperanza absolutas.

            Esta postura nos lleva a negar todo sentido de trascendencia y creer que todo empieza y termina en mí mismo, aquí y ahora y, por tanto, nada tiene sentido si no es centrar toda mi vida, mi fuerza y mi inquietud en disfrutar pasándolo bien y eludiendo cualquier responsabilidad que me pueda suponer un esfuerzo en la vida.

            Pensar y vivir así es hacer una reducción de la vida que nos equipara a cualquier animal, pues no haríamos otra cosa que satisfacer los instintos primarios sin otro horizonte que vivir.

 

DOMINGO XXXIV DEL T.O. -A-

 SOLEMNIDAD DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO,

REY DEL UNIVERSO

 De andar por casa

       “Quien advierte bien te quiere”. Es tu amigo y no deja que fracases. Esta frase la oímos con mucha frecuencia, pues es una realidad que vivimos a cada momento; de la misma manera que quien deja que nos estrellemos y hasta se alegra de ello, podemos considerarlo nuestro peor enemigo.

         Quien deja que nos precipitemos en el fracaso y hasta nos empuja a caer en él es alguien de quien debemos guardarnos, aunque muchas veces suele ser a quien más escuchamos, pero en la medicina llevamos el castigo.

 ✠ Lectura del santo Evangelio según san Mateo. Mt 25, 31-46

Se sentará en el trono de su gloria y separará a unos de otros

             EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

«Cuando venga en su gloria el Hijo del hombre, y todos los ángeles con él, se sentará en el trono de su gloria y serán reunidas ante él todas las naciones.
            Él separará a unos de otros, como un pastor separa las ovejas de las cabras.
Y pondrá las ovejas a su derecha y las cabras a su izquierda. Entonces dirá el rey a los de su derecha:
“Venid vosotros, benditos de mi Padre; heredad el reino preparado para vosotros desde la creación del mundo. Porque tuve hambre y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, fui forastero y me hospedasteis, estuve desnudo y me vestisteis, enfermo y me visitasteis, en la cárcel y vinisteis a verme”.
            Entonces los justos le contestarán:
“Señor, ¿cuándo te vimos con hambre y te alimentamos, o con sed y te dimos de beber?; ¿cuándo te vimos forastero y te hospedamos, o desnudo y te vestimos?; ¿cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y fuimos a verte?”.
            Y el rey les dirá:
“En verdad os digo que cada vez que lo hicisteis con uno de estos, mis hermanos más pequeños, conmigo lo hicisteis”.
            Entonces dirá a los de su izquierda:
“Apartaos de mí, malditos, id al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles. Porque tuve hambre y no me disteis de comer, tuve sed y no me disteis de beber, fui forastero y no me hospedasteis, estuve desnudo y no me vestisteis, enfermo y en la cárcel y no me visitasteis”. Entonces también estos contestarán:
“Señor, ¿cuándo te vimos con hambre o con sed, o forastero o desnudo, o enfermo o en la cárcel, y no te asistimos?”.
Él les replicará:
“En verdad os digo: lo que no hicisteis con uno de estos, los más pequeños, tampoco lo hicisteis conmigo”.
Y estos irán al castigo eterno y los justos a la vida eterna».

Palabra del Señor.

 REFLEXION

             Jesús deja bien claro el camino: una vida vivida en el amor y la justicia, te lleva necesariamente a gastártela en beneficio de los demás.

            El programa cristiano no es un ideario político ni religioso, sino un estilo de vida que se resume en lo que llamamos “Obras de Misericordia”.

            Vivir en cristiano es vivir amando de una forma muy concreta: compartiendo tu comida con el que no tiene para comer; compartiendo tu ropa con el que no tiene para vestirse; tu casa con quien está en la calle; estando al lado del que sufre por enfermedad, porque está solo, porque no tiene trabajo o tiene problemas… Es decir: siendo solidario

            Y Jesús lo advierte: Cuando llegue el momento definitivo la pregunta que me va a hacer no es cuantos rosarios he rezado ni a cuantas cofradía he pertenecido ni las veces que he hecho el camino del Rocio… sino: “¿Dónde estabas cuando me moría de hambre o de sed, me encontraba solo y abandonado, en la cárcel, enfermo, sin trabajo, sin poder pagar el alquiler y me echaban a la calle… ¿En qué andabas distraído?

            O tal vez me diga: ¡Bienvenido! ¡Gracias, porque cuando me vi agobiado me diste tu mano! Y esta actitud será la que haga que las puertas del reino estén abiertas para nosotros. Todo lo demás no tendrá valor si es que no es expresión y celebración de lo que se vive.

 

DOMINGO XXXIII DEL T.O. -A-

De andar por casa

       “Yo no pienso matarme ni sacarle las castañas del fuego a nadie”. Es la frase que escuchamos con mucha frecuencia.

         Recuerdo que en la fábrica donde trabajaba, un compañero llegó a reprenderme porque yo cumplía con mi obligación y no perdía el tiempo en las horas de trabajo y me dijo: “¿Es que piensas heredar?”

         Una forma rara de entender la justicia es pensar que somos solo sujeto de derechos y no de obligaciones.

 Lectura del santo Evangelio según san Mateo. Mt 25, 14-15. 19-21

Como has sido fiel en lo poco, entra en el gozo de tu Señor

            EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola:
«Un hombre, al irse de viaje, llamó a sus siervos y los dejó al cargo de sus bienes: a uno le dejó cinco talentos, a otro dos, a otro uno, a cada cual según su capacidad; luego se marchó.
            Al cabo de mucho tiempo viene el señor de aquellos siervos y se pone a ajustar las cuentas con ellos.
            Se acercó el que había recibido cinco talentos y le presentó otros cinco, diciendo:
            “Señor, cinco talentos me dejaste; mira, he ganado otros cinco”. Su señor le dijo:
“Bien, siervo bueno y fiel; como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante; entra en el gozo de tu señor”»….

            Se acercó también el que había recibido un talento y dijo:
“Señor, sabía que eres exigente, que siegas donde no siembras y recoges donde no esparces, tuve miedo y fui a esconder tu talento bajo tierra. Aquí tienes lo tuyo”.
            El señor le respondió:
            “Eres un siervo negligente y holgazán. ¿Conque sabías que siego donde no siembro y recojo donde no esparzo? Pues debías haber puesto mi dinero en el banco, para que, al volver yo, pudiera recoger lo mío con los intereses. Quitadle el talento y dádselo al que tiene diez. Porque al que tiene se le dará y le sobrará, pero al que no tiene, se le quitará hasta lo que tiene. Y a ese siervo inútil echadlo fuera, a las tinieblas; allí será el llanto y el rechinar de dientes”».

Palabra del Señor.

 REFLEXIÓN

               La parábola hoy la podríamos contar dándole un pequeño retoque: “Un propietario envió a unos amigos  para que se encargaran cada uno de una parte de sus bienes, trabajaran con ellos, vivieran y fueran felices, dándoles todo lo que necesitaban para cumplir la misión que tenían, pues además lo tendrían siempre a su disposición para lo que lo necesitasen.

            Según fue creyendo que habrían terminado, los fue llamando para que entregaran el encargo que les había hecho y la sorpresa fue espectacular: encontró de todo: desde los que habían sido plenamente felices y habían triunfado en la vida, hasta los que lo habían perdido todo y se dedicaron a destrozar lo que les había dejado.

            Lógicamente, cada uno tuvo que dar cuantas de lo que había recibido y lo que había hecho, aparte de la vida que había perdido y del daño realizado.

            A cada uno de nosotros se nos ha dado una parte de esa hacienda y los medios para sacar de ella el máximo fruto. ¿Qué es lo que estoy haciendo? ¿En qué estoy empleando los dones que el Señor me ha dado?

DOMINGO XXXII DEL T.O. -A-

 De andar por casa

       “La vida son cuatro días y hay que vivirla, quien no lo hace es tonto”,    Esta es la frase que constantemente estamos escuchando como consejo para vivir; pero lo triste es que la mayoría de las veces, “vivir” se entiende por gozar con los sentidos y disfrutar del placer, en cambio, el vivir preocupados y entregados a una causa se considera una perdida inútil de tiempo y de vida que no lleva a nada.

 Lectura del santo Evangelio según san Mateo. Mt 23, 1-13

¡Que llega el esposo, salida su encuentro!

            EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola:
«Se parecerá el reino de los cielos a diez vírgenes que tomaron sus lámparas y salieron al encuentro del esposo.
Cinco de ellas eran necias y cinco eran prudentes.
Las necias, al tomar las lámparas, no se proveyeron de aceite; en cambio, las prudentes se llevaron alcuzas de aceite con las lámparas.
El esposo tardaba, les entró sueño a todas y se durmieron.
A medianoche se oyó una voz:
“¡Qué llega el esposo, salid a su encuentro!”.
Entonces se despertaron todas aquellas vírgenes y se pusieron a preparar sus lámparas.
Y las necias dijeron a las prudentes:
“Dadnos de vuestro aceite, que se nos apagan las lámparas”.
Pero las prudentes contestaron:
“Por si acaso no hay bastante para vosotras y nosotras, mejor es que vayáis a la tienda y os lo compréis”.
Mientras iban a comprarlo, llegó el esposo, y las que estaban preparadas entraron con él al banquete de bodas, y se cerró la puerta.
Más tarde llegaron también las otras vírgenes, diciendo:
Señor, señor, ábrenos.
Pero él respondió:
“En verdad os digo que no os conozco”.
Por tanto, velad, porque no sabéis el día ni la hora».
Palabra del Señor.

 REFLEXIÓN

             En mis tiempos de juventud, estando en toda la fiebre del 68 había un grafiti que decía “España es tuya, rómpela”, es decir: disfruta, vive a tope los sentidos, que no te detenga nada, experiméntalo todo… y se pasa por la vida como una tormenta de granizos.

            Cuando pasan los años, te das cuenta que no has construido nada de lo que soñabas, te has dedicado a pasártelo bien, y ahora no hay vuelta atrás, ya no puedes pedir a los demás que hagan lo que tú soñabas hacer, tu lámpara ya no tiene más aceite y no hay vuelta atrás, lo que hiciste o dejaste de hacer es la única realidad con la que te encuentras… y no hay fracaso más grande en la vida que llegar al final con las manos vacías, sin que nadie se alegre de que hayas venido al mundo, pues no dejas más que tristeza y desolación y, el peor de los fracasos es que a estas alturas no seas más que un estorbo que estén todos deseando de que desaparezcas

DOMINGO XXXI DEL T. O. -A-

 De andar por casa

       Infinidad de veces hemos escuchado el dicho: ”Haced lo que yo os digo pero no hagáis lo que yo hago“. Esto no es sino la aplicación de la ley del embudo: lo ancho para mí y lo estrecho para los demás.

         Este es uno de los defectos que nos ataca a todos por el que exigimos a los demás lo que nosotros no hacemos y les pedimos lo que nosotros no damos, pero siempre encontramos justificación para nuestra postura y una condena para la de los otros.

 Lectura del santo Evangelio según san Mateo. Mt 23, 1-12

Ellos dicen, pero no hacen

            EN aquel tiempo, habló Jesús a la gente y a sus discípulos, diciendo:
«En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y los fariseos: haced y cumplid todo lo que os digan; pero no hagáis lo que ellos hacen, porque ellos dicen, pero no hacen. Lían fardos pesados y se los cargan a la gente en los hombros, pero ellos no están dispuestos a mover un dedo para empujar.
            Todo lo que hacen es para que los vea la gente: alargan las filacterias y agrandan las orlas del manto; les gustan los primeros puestos en los banquetes y los asientos de honor en las sinagogas; que les hagan reverencias en las plazas y que la gente los llame “rabbí”.
            Vosotros, en cambio, no os dejéis llamar “rabbí”, porque uno solo es vuestro maestro y todos vosotros sois hermanos.
            Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra, porque uno solo es vuestro Padre, el del cielo.
            No os dejéis llamar maestros, porque uno solo es vuestro maestro, el Mesías.
            El primero entre vosotros será vuestro servidor.
            El que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido».
Palabra del Señor.

 REFLEXIÓN

             Jesús se opone abiertamente a la postura de los dirigentes que están machacando al pueblo con impuestos y normas que les hacen la vida imposible, mientras ellos disfrutan  de toda clase de  beneficios de todo tipo, como si la ley y el esfuerzo fuera solo para unos pocos y ellos estuvieran exentos de todo.

            No admite la postura de ir proclamando lo que hay que hacer, mientras no sean ellos los que van delante haciendo lo que piden, pues han sido puestos para servir y ser guías y animadores de la comunidad y no patrones ni parásitos de ella, por eso no admite tampoco que, aprovechándose del puesto, se hagan llamar maestros, padres, señores… sino servidores, que es el máximo título y dignidad que tiene un discípulo de Cristo.

            Pero estamos muy lejos de esta postura de Jesús y de este consejo que dio a los suyos: la búsqueda de títulos, de puestos, de beneficios… es algo que está en contradicción con los principios que Jesús dejó a su iglesia… ¿O es que se equivocó?

 

DOMINGO XXX DEL T.O. -A-

 De andar por casa

         ¿Te has dado cuenta cuando te abordan los testigos de alguna secta la cantidad de citas que te sacan de la biblia para apabullarte y piensas: ¡que preparada está esta gente y yo, en cambio no tengo ni idea…!”?  Y te quedas apabullado, pues no has tenido ni un solo argumento para rebatirles…

         Algo parecido le ocurría a cada momento a Jesús y mira cómo se los quitó de encima.

 Lectura del santo Evangelio según san Mateo. Mt 22, 34-40

Amarás al Señor, tu Dios, y a tu prójimo como a ti mismo

            EN aquel tiempo, los fariseos, al oír que Jesús había hecho callar a los saduceos, se reunieron en un lugar y uno de ellos, un doctor de la ley, le preguntó para ponerlo a
prueba:
            «Maestro, ¿Cuál es el mandamiento principal de la ley?». Él le dijo: «“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente”.
Este mandamiento es el principal y primero. El segundo es semejante a él:
“Amarás a tu prójimo como a ti mismo”.
            En estos dos mandamientos se sostienen toda la Ley y los Profetas».
Palabra del Señor.

 REFLEXIÓN

             Y es que es así: Jesús no nos dejó un código con un montón de leyes, ni un libro lleno de normas, como las que tenían los judíos… Nos dejó un solo mandamiento “AMAOS LOS UNOS A LOS OTROS COMO YO OS HE AMADO… Y EN ESTO CONOCERÁN QUE SOIS DE LOS MIOS” porque quien AMA de verdad, tiene toda la ley cumplida.

         Dios es “persona” y Dios es Amor; por tanto, el amor es la máxima expresión de Dios, cuanto más amamos más “persona” somos, más parecidos a Dios somos; pero esto tenemos que demostrarlo como Jesús lo demostró: amando hasta dar la vida por los demás, si es que es necesario.

         Un amor que se queda en palabras o en ideas y no pasa a los hechos que puedan ser percibidos, no es más que una falacia, un engaño. De ahí que: “Obras son amores y no buenas razones”.

         La respuesta de Jesús al doctor en leyes lo dejó sin argumentos y al descubierto, pues amar no es cumplir leyes, sino hacer que el otro se sienta acogido, acompañado, comprendido, servido, ayudado… amado.

 

DOMINGO XXIX DEL T.O. -A-

 De andar por casa

         ¿Cuántas veces hemos escuchado que “la iglesia no debe meterse en política”?

         Es importante que entendamos que “POLÍTICA” es el arte de crear unas relaciones justas y fraternas entre los ciudadanos de forma que podamos vivir entre nosotros en paz, en armonía, respetando los derechos de cada persona y el bien común…” ¿Y qué hace el evangelio si no es eso?

         Otra cosa es la POLITIQUERÍA que es el arte de engañar al pueblo para sacar adelante los intereses particulares de un partido.

         El gran problema es cuando todo lo reducimos a “POLITIQUERÍA”, entonces nos convertimos en enemigos los unos de los otros.

 Lectura del santo Evangelio según san Mateo. Mt 22, 15-21

Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios

            EN aquel tiempo, se retiraron los fariseos y llegaron a un acuerdo para comprometer a Jesús con una pregunta.
            Le enviaron algunos discípulos suyos, con unos herodianos, y le dijeron:
«Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad, sin que te importe nadie, porque no te fijas en apariencias. Dinos, pues, qué opinas:
            ¿Es lícito pagar impuesto al César o no?».
            Comprendiendo su mala voluntad, les dijo Jesús: «Hipócritas, ¿por qué me tentáis? Enseñadme la moneda del impuesto».
            Le presentaron un denario.
            Él les preguntó: «De quién son esta imagen y esta inscripción?».
            Le respondieron: «Del César».
            Entonces les replicó: «Pues dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios».
Palabra del Señor.

             A Jesús le presentan un problema político que lo quieren  derivar al terreno de la politiquería: Le están presentando si es lícito quitar a Dios del horizonte y suplantarlo por los intereses del imperio, es decir por la “politiquería” y Jesús deja bien claro que antes que Dios no se puede poner otra cosa, otro interés u otro régimen.

         Todo lo que sea suplantar a Dios, es destruir y esclavizar al hombre y el hombre, está por encima de cualquier otro valor o interés. Y Dios ha optado por el hombre, porque éste es imagen y semejanza suya.

         Jesús deja bien claro que Cesar no puede proclamarse Dios, ni exigir que se le dé culto, como estaba intentando; algo parecido a lo que ocurre en el momento actual en donde se quiere quitara a Dios y poner el relativismo, el subjetivismo y el materialismo como principios fundamentales de la vida. Eso lleva a la degradación total y absoluta del hombre

DOMINGO XXVIII DEL T.O. -A-

          De andar por casa

         ¿Cuántas veces hemos escuchado y hasta hemos dicho nosotros: “Primero la obligación antes que la devoción?”

         Pero tal vez no nos hemos detenido a pensar ni lo que es “obligación” ni lo que es la “devoción” y con frecuencia confundimos la jerarquía de valores, dejando lo principal a un lado y centrando toda la atención en lo que es secundario.

  Lectura del santo Evangelio según san Mateo. Mt 22, 1-10

A todos los que encontréis, llamadlos a la boda

            EN aquel tiempo, volvió a hablar Jesús en parábolas a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo, diciendo:
            «El reino de los cielos se parece a un rey que celebraba la boda de su hijo; mandó a sus criados para que llamaran a los convidados, pero no quisieron ir. Volvió a mandar otros criados encargándoles que dijeran a los convidados:
            “Tengo preparado el banquete, he matado terneros y reses cebadas y todo está a punto. Venid a la boda”.
            Pero ellos no hicieron caso; uno se marchó a sus tierras, otro a sus negocios, los demás agarraron a los criados y los maltrataron y los mataron. El rey montó en cólera, envió sus tropas, que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la ciudad.
            Luego dijo a sus criados: “La boda está preparada, pero los convidados no se la merecían. Id ahora a los cruces de los caminos y a todos los que encontréis, llamadlos a la boda”.
            Los criados salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos. La sala del banquete se llenó de comensales».
Palabra del Señor.

 REFLEXIÓN

                 Efectivamente, antes que ser justos, ser sinceros, actuar con amor y misericordia, ser testigos de la verdad, construir la paz… esta es la invitación que nos está haciendo Dios a cada momento, sin embargo, ¿A cambio de qué estamos dejando todas estas actitudes y valores a un lado y en su lugar ponemos otra cosa?

         No hace falta pensar en cosas raras; céntrate en tu hogar ¿a cambio de qué estás dejando de sentarte un rato a dialogar con tu mujer, con tu marido, con tus hijos, hablar de temas interesantes, escuchar sus problemas…? ¿Qué es lo que te lo está impidiendo? ¿Qué es lo que te está impidiendo en tu vida que dediques un tiempo a pensar en la situación que vives y organizar tu vida de cara a algo que realmente valga la pena? ¿Qué te tiene tan ocupado?

         Es muy posible que cuando quieras acordar ya no haya posibilidad, has perdido tantas oportunidades que ya no hay vuelta atrás… cuando quieras entrar, la puerta ya esté cerrada, no hay posibilidad de desandar el camino.

DOMINGO XXVII DEL T.O. -A-

          De andar por casa

         ¿Cuántas veces hemos escuchado el refrán: “Cría cuervos y te sacarán los ojos”?

          Lo aplicamos cuando hemos puesto lo mejor que teníamos, hemos dado lo mejor de nuestra vida y luego nos responden con una patada. Es algo que duele enormemente, pues no entra en nuestra cabeza que se pueda ser tan irresponsables y desagradecidos.

 

  Lectura del santo Evangelio según san Mateo. Mt 21, 33-43

Arrendará la viña a otros labradores


            EN aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo:
«Escuchad otra parábola: “Había un propietario que plantó una viña, la rodeó con una cerca, cayó en ella un lagar, construyó una torre, la arrendó a unos labradores y se marchó lejos. Llegado el tiempo de los frutos, envió sus criados a los labradores para percibir los frutos que le correspondían. Pero los labradores, agarrando a los criados, apalearon a uno, mataron a otro y a otro lo apedrearon.
            Envió de nuevo otros criados, más que la primera vez, e hicieron con ellos lo mismo. Por último, les mandó a su hijo diciéndose: ‘Tendrán respeto a mi hijo’.
            Pero los labradores, al ver al hijo se dijeron: ‘Este es el heredero: venid, lo matamos y nos quedamos con su herencia’.
            Y agarrándolo, lo sacaron fuera de la viña y lo mataron. Cuando vuelva el dueño de la viña, ¿qué hará con aquellos labradores?».
            Le contestan:
            «Hará morir de mala muerte a esos malvados y arrendará la viña a otros labradores que le entreguen los frutos a su tiempo».
            Y Jesús les dice:
            «No habéis leído nunca en la Escritura:
“La piedra que desecharon los arquitectos
es ahora la piedra angular.
Es el Señor quien lo ha hecho,
ha sido un milagro patente”
            Por eso os digo que se os quitará a vosotros el reino de Dios y se dará a un pueblo que produzca sus frutos».
Palabra del Señor.

 REFLEXION

                Ya en el AT. La queja de todos los profetas es la misma que podemos trasplantar al NT. Y que Jesús hace suya: el pueblo no reconoce todo lo que Dios ha hecho con él y le responde con ingratitud y desprecio…

         En el mundo en que vivimos, esto tiene una actualidad impresionante: traigo a la memoria un caso desolador que nos puede ayudar a entender el tema que nos presenta hoy la palabra de Dios: el padre de hija única, mimada hasta el extremo. Llega la policía una madrugada, a las tres, para decirle que salga a recoger a su hija que está en un fuerte problema: se había metido en una discoteca y había logrado enzarzar a tres jóvenes que se peleaban por ella.

         Llegó el padre y quiso sacarla de la pelea y la chica denunció a su padre de haber abusado de ella.

         Al padre le prohibieron acercarse a su casa durante 6 meses. Llorando me decía que quería morirse.

         Es la imagen que denuncia el profeta y que Jesús hace suya para denunciar al mundo en el que vivieron y en el que vivimos. ¿A dónde piensa llegar esta deriva que hemos cogido?