De andar por casa:
¡Cuántas veces hemos escuchado decir:
“fulanito no es un tipo de iglesia, pero tiene un corazón de oro”. Y cuando nos
acercamos a esa persona, efectivamente, no suele ir a los actos de culto, pero
tiene las ideas muy claras, aquellas ideas que Jesús decía y que constantemente
insistía a sus discípulos; cuando hemos hablado con esa persona, damos gracias
a Dios por haberla conocido. Escucha lo que dice Jesús…
EVANGELIO
✠ Lectura del santo Evangelio
según san Juan. Jn 10, 27-30
Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo
mismo el pescado
EN aquel tiempo, dijo Jesús:
«Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen, y yo les doy
la vida eterna; no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano.
Lo que mi Padre me ha dado es más que todas las cosas, y nadie puede arrebatar
nada de la mano de mi Padre.
Yo y el Padre somos uno».
Palabra del
Señor.
Incluso dice Jesús: “Cuando llegue el momento que nos
presentemos delante del Padre os dirá: Venid benditos a poseer el reino
preparado para vosotros porque cuando tuve hambre, sed, estaba desnudo,
enfermo, en la cárcel…y fuisteis solidarios conmigo” y no habla de otra
cosa.
Es más, la actitud de sus ovejas,
está expuesta en su programa de vida: las BIENAVENTURANZAS; cada una de estas
bienaventuranzas es un auténtico proyecto de vida que se expresa en la práctica
con la realización de las obras de misericordia vividas en plena libertad, como
corresponde al amor.
Entonces, ¿Qué sentido tiene todo lo
que tenemos montado en torno al templo, a las leyes, a los castigos… al dinero
que está presente en toda la vida?
Ese no es el camino que Él proclama,
ni es por ahí por donde se escucha su
palabra y, menos aún, por otros caminos tan cotizados y buscados en nombre de
Jesús que lo único que hacen es suplantar al verdadero PASTOR y espantar a las
ovejas.